SIN NOMBRE

Título
Sin nombre
Autor: Wilkie Collins
Traducción: Gema Moral Bartolomé
Idioma original: Inglés
Editorial: Alba Editorial
Año publicación/edición: 1862/2020
Páginas: 712


Sinopsis oficial:
Una imprevista tragedia familiar, que saca a la luz el secreto de la ilegitimidad de su nacimiento, deja a las hermanas Vanstone privadas de todo derecho a recibir su herencia. Solas, sin posición, sin fortuna, sin nombre, estas dos «hijas de nadie» afrontan con desigual talante su inesperado destino: mientras Norah, la mayor, lo acepta resignada, la menor, Magdalen, se rebela contra él y decide recuperar el legado al que su propia identidad, según descubre una vez despojada de ella, va inseparablemente unida. Emprende así, perseguida y censurada, un peligroso viaje por los límites de la sociedad, un ambiguo y oscuro territorio por el que pululan no sólo desheredados y truhanes como el genial capitán Wragge, «agricultor moral», sino también, curiosamente, algunos de los herederos legales de la fortuna Vanstone, seres enfermizos y solitarios. Sin nombre, tal vez la más original y brillante de las novelas de Wilkie Collins, suma de su talento para «la creación de un mundo teatral a partir de un caos doméstico», no es sin embargo sólo una apasionante intriga testamentaria, sino una extraña tragicomedia sobre la indignación y la perplejidad, escenificada, en palabras de Dickens, con «todas las cualidades que llevaron al éxito a La dama de blanco sin el menor signo de seguir aferrado a ese éxito o de verse arrastrado por él».

Opinión:
Voy sumando títulos leídos de Wilkie Collins... Hoy hablo de Sin nombre, novela que tenía muchas ganas de leer por las opiniones que había visto sobre ella y por el interés que me causaba su sinopsis. Ya puedo decir que no me ha disgustado en absoluto, aun siendo de una extensión considerable: cercana a las ochocientas páginas en esta edición. Diría que la potencia de este autor reside, entre otras cosas, en la forma en la que consigue enganchar al lector. Esta historia y su formato han mantenido en todo momento mi interés. En cuanto a su estructura, la novela está dividida en ocho partes (ocho «escenas» en diferentes lugares) narradas en tercera persona, y estas a su vez están separadas por unos apartados de «entreactos», en los que se sigue desarrollando la historia pero de forma epistolar (a través del correo entre los diferentes personajes). Esta mezcolanza me ha gustado mucho, y también menciono el toque humorístico del autor a la hora de narrar que para mí no pasa desapercibido y que disfruto bastante. Y ahora me centro en hablar sobre lo que he encontrado en este pequeño tochito de Collins...

En esta historia se nos presenta a Magdalen, una joven de carácter alegre y vivaz, perteneciente a la bien posicionada familia Vanstone; tanto ella como su hermana quedan de la noche a la mañana sin nombre y sin herencia al morir sus padres de forma un tanto imprevista. Detrás de todo hay una problemática legal relacionada con matrimonios tardíos, ignorancia en base a leyes testamentarias, testamentos no actualizados a tiempo y muertes inesperadas y rápidas... La cuestión es que aquello que el padre quería dejar para sus hijas no puede aplicarse legalmente, todo lo hereda un hermano del señor Vanstone con el que este tuvo sus más y sus menos en el pasado, teniendo una relación nula en el presente. El tío de las jóvenes al recibir la herencia de todo el patrimonio de su hermano, decide no prestar atención a la salvaguarda de sus sobrinas, asume lo que le toca por ley y además lo considera justo debido a las rencillas del pasado. Magdalen no está dispuesta a quedarse de brazos cruzados —a diferencia de su hermana Norah que acata lo que les viene dado—, y comienza a idear un plan para recuperar lo que les pertenece. Nos moveremos con Magdalen en los diferentes pasos que dará para poder llevar a cabo lo que tiene en mente, pasos peligrosos que le harán perder toda dignidad y decencia a ojos de la sociedad. No estará del todo sola, el capitán Wragge, un pariente lejano de gran agudeza y poca vergüenza, viendo posibles ganancias propias se adhiere al camino de esta su sobrina especial. Mientras que ellos se organizan, el viejo tío Vanstone que recibió la herencia muere, y esta pasa a manos de su hijo, Noel Vanstone, un joven excéntrico y enfermizo sobre el que Magdalen apuntará su arco estratégico... Pero, ¡ojo!, el joven Vanstone no está solo, su ama de llaves, la señora Lecount (cuyo ingenio y perspicacia iguala a las de aquellos que idean una conspiración contra su amo) mostrará una fuerte e implacable defensa. ¿Por qué circunstancias tendrá que pasar Magdalen y qué resultados tendrán sus planes?

Comenzamos con un poco de misterio, que nos lleva a estar intrigados por eventos del pasado, pero esto se resuelve relativamente pronto; no es esta una novela de misterio como otras del autor, sino de expectación en otro sentido. Sabemos lo que ha pasado y cómo estas jovencitas han quedado en esa injusta situación, lo que nos queda es ir viendo cómo Magdalen va a llevar a cabo su plan para recuperar esa herencia que considera que les pertenece: los actos que va a realizar; el enfrentamiento entre los dos titanes de ingenio singular como son el capitán Wragge y la señora Lecount —que para mí adquieren el protagonismo de la novela en gran parte de la misma—; cómo acabarán las estrategias implementadas —algunas salen bien, otras no tanto—; cómo harán frente a los ataques recibidos; cómo se van forjando relaciones especiales entre todos ellos... ¿Qué destino y qué fin encontrará Magdalen con estas decisiones de vida tan arriesgadas que toma? Sí que es cierto que, ya en las partes finales, algunos eventos que ocurren se me hacen algo decepcionantes (me pasó algo similar en su otra novela La piedra lunar, algunos acontecimientos finales me chirriaron también). En esta algunos sucesos me resultan bastantes fortuitos, e incluso podría decirse algo insólitos o chocantes, y resuelven parte de la trama de forma precipitada... Me dejaron cierto regusto amargo en esa última parte; pero, de todas formas, el cierre no me ha disgustado y he quedado satisfecha, mereciéndome totalmente la pena esta lectura de gran extensión pero de ameno recorrido, con unos personajes grises, complejos y bien definidos a mi modo de ver. 

La temática central podría decirse que es esa crítica a las leyes de la Inglaterra del momento en relación a los hijos considerados ilegítimos, que podrían considerarse injustas sobremanera, dejando a descendientes desamparados sin poder agarrarse a ninguna ley ni hacer valer sus derechos de forma alguna... «Debemos enfrentarnos a la cruda realidad. Las hijas del señor Vanstone no son hijas de nadie, y la ley las deja desvalidas a merced de su tío». También pueden apreciarse otro tipo de críticas sociales, pero un tema que considero destacable es ese que nos habla de la conjugación del bien y del mal en la persona, de sus luces y sus sombras; de cómo algunos reaccionan ante diversos eventos de forma distinta a otros por su naturaleza, aquello que no podemos controlar, lo que se lleva dentro junto a esa personalidad que vamos desarrollando con nuestro entorno.

¿Existe en todo ser humano, bajo ese carácter externo y visible al que dan la forma las influencias sociales que nos rodean, una naturaleza interna e invisible que forma parte de nosotros mismos y que la educación puede modificar indirectamente. pero no cambiar por completo? ¿Existen fuerzas innatas hacia el Bien o hacia el Mal en todos nosotros, de infinita variedad según cada individuo y tan enraizadas que no hay estímulo ni represión en este mundo que pueda alterarlas? ¿Un Bien y un Mal ocultos, a merced ambos por igual de la oportunidad liberadora o de la tentación precisa?

Pudiera ser que bajo la superficie así formada —una superficie que hasta aquel momento, en la vida feliz, próspera y sin incidentes de las hermanas, nada había perturbado— hubieran permanecido ocultas unas fuerzas innatas que la conmoción de la primera calamidad de su vida hubiera ahora arrojado a la luz. ¿Era así? ¿Brillaba una promesa de futuro con luz profética a través de la superficie sombría de la reserva de Norah,  y se ensombrecía con oscuridad profética bajo el resplandor superficial del animado carácter de Magdalen?

Si no has leído a Collins, te la recomiendo (si te gustan los libros de carácter clásico, este tipo de historias y esta extensión, podría ser de tu gusto). Personalmente, disfruto mucho del estilo y la forma de narrar del autor, y no soy la única ni de lejos... Leídas La dama de blanco, La piedra lunar y esta, coloco la La dama de blanco en primer lugar, luego Sin nombre, y por último, La piedra lunar (esta me decepcionó bastante, esperaba mucho más de ella pero igualmente me gustó leerla). En fin, seguiré leyendo a Collins, tengo esperando La dama de Glenwith Grange, libro de relatos, y también La respuesta es no, alguno de ellos caerá próximamente.

Comentarios

  1. Excelente propuesta a la que le prestare atencion!
    Gracias por compartirla, saludosbuhos.

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    1. Collins diría que siempre es buena idea...
      Creo que como mínimo promete amenos ratos lectores.
      Si lees este, que lo disfrutes también.
      Un abrazo.

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  2. Hola, leí la novela hace muchos años,
    y me encantó, porque Willie Collins es de mis autores clásicos favoritos. A mi La piedra lunar me gustó mucho; como casi todas las novelas de este autor las leí antes de tener el blog, y ahora quiero releerlas y reseñar las con calma, una de ellas será La piedra lunar, aunque no creo que sea este año, que tengo ya programadas mis lecturas. Un abrazo.

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    1. Hola, Mar.
      La verdad es que este autor es de esos que leerlos suele hacerse muy placentero, atrapa muy bien y garantiza buenos ratos lectores (aunque algunos aspectos de las novelas que he leído de él me hayan chirriado un poco, merecen la pena totalmente). A mí de La piedra lunar, como comento en la reseña que hice de ella, me gustaron cosas pero en ciertos aspectos sí que me esperaba algo distinto, especialmente ya cercano a la resolución me decepcionó (también llevaba unas expectativas bastante altas, que muchas veces también juegan malas pasadas...). Pero vaya, que este autor para todos aquellos que nos gusta el estilo clásico y este tipo de novelas es una muy buena opción. Seguiré leyéndolo...
      Y tú, pues como dices, a ponerte con esas relecturas que tienes en mente y así también regresas a esas historias, pudiendo dejar tus reseñas sobre las mismas que leeré encantada.
      Un abrazo.

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  3. Hola María, yo cómo tú pongo en primer lugar La dama de blanco, que ¡me encantó! La piedra lunar también me gustó, quizá más que a ti, por lo que parece. Y luego leí Armadale que es una maravilla con una villana de excepción. Tengo pendientes en el kindle, La respuesta es no y este... seguro que caerán.
    Un besazo

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    1. Ay, qué ganas le tengo a Armadale. Lo leeré en algún momento seguro seguro!!!
      La respuesta es no tiene todas las papeletas en mi caso para ser el siguiente... Ya veremos qué nos parece cuando lo leamos. Y si lees este, no creo que te decepcione tampoco.
      Un abrazo.

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  4. Otro autor más que no leí y que anoto. Basta, no me da la vida, jaja.
    Gracias por tus buenas recomendaciones.
    Cariños.

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    1. jajajaja la enorme lista de pendientes, no solo de títulos sino también de autores/as que queremos leer... Pero bueno, que no se agote nunca esa lista.
      Un abrazo.

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