UNA CABEZA CERCENADA

Título:
 Una cabeza cercenada
Autora: Iris Murdoch
Traducción: Enrique Maldonado Roldán
Idioma original: Inglés
Editorial: Impedimenta
Año publicación/edición: 1961/2023
Páginas: 272

Sinopsis oficial:
En la neblinosa Londres, la fidelidad es un concepto inasible. Martin Lynch-Gibbon se siente un hombre afortunado: es un hedonista, está casado con Antonia, a quien le une más la conveniencia que el amor, y tiene una llamativa y joven amante. Asentado en el plácido devenir de las élites burguesas londinenses, dirige su vida y la empresa familiar con sosiego, lo tiene todo bajo control. Hasta que un día vuelve a casa y su mujer le confiesa que ha tenido una aventura con Palmer Anderson, su psicoanalista y amigo de la pareja, y le pide el divorcio. Mientras Martin se esfuerza por volver a tener la cabeza sobre los hombros, conoce a la hermanastra de Palmer, Honor Klein, una profesora de antropología que llega de visita desde Cambridge. La sociedad británica se tambalea a las puertas de la década de los sesenta, y Murdoch vuelca los primeros pasos de la revolución sexual en una magistral novela de enredo. Sin duda alguna su obra más divertida.

Opinión: 
De esta autora reseñé hace poco: Algo del otro mundo, relato con el que me inicié con su literatura y que me pareció estupendo. Una cabeza cercenada ha sido mi segundo encuentro con Iris Murdoch y no he quedado decepcionada: ¡ha cumplido con creces mis expectativas! 

En esta novela, Murdoch nos sitúa en el Londres de principios de los años sesenta y nos presentan a unos personajes complejos, intensos, que lidian con crisis personales y relaciones complicadas. Todo nos lo muestra desde la perspectiva de nuestro narrador, Martin Lynch-Gibbon, que comienza desvelándonos que está casado y que mantiene una relación desde hace un tiempo con una joven, joven que es bastante contraria en carácter a su mujer. Tanto su esposa como su amante son importantes en su vida, se siente realmente bendecido por tenerlas. En un momento dado, su mujer le confiesa que tiene una relación con su psicoanalista y que quiere el divorcio... A partir de aquí, se desencadena todo un juego turbio de relaciones entre ellos y más figuras que se van sumando. No saber de antemano los detalles de esta red de relaciones, algo rocambolesca, es lo mejor, diría yo: así tu experiencia lectora no se verá contaminada en ese sentido. Pero sí puedo decir que están muy presentes las dobleces, el egoísmo, los impulsos humanos; los giros y las sorpresas con las que nos podemos encontrar en la vida y en nuestras relaciones con los demás. Te introducirás en una maraña de actos complejos, donde la moralidad también tiene su peso. Cuando se baja al fondo, a nuestro interior y a lo profundo de las relaciones, todo se torna más complicado, mucho más que a simple vista.

Había una cabeza de barro en las primeras etapas de composición, esas etapas tempranas en las que la estructura de alambre se ha terminado de rellenar en líneas generales y la arcilla se ha dispuesto encima en varias direcciones con largos bloques hasta que aparece algo semejante a una cabeza. Este momento concreto siempre me ha parecido asombroso, cuando la figura sin rostro adquiere una personalidad cuasihumana que nos trae a la imaginación la creación de monstruos. 

Se reflexiona sobre la felicidad, elástica y cambiante, y la propia identidad. Sobre lo que damos por seguro en nuestras vidas y relaciones, y en lo equivocado que podemos estar al no ser la realidad que nos rodea exactamente como imaginamos. Analizar y atender a la verdad, y a lo que hay oculto en la cotidianidad, ayuda a ser más consciente de lo que realmente somos, o de lo que son los que nos rodean, pero siempre todo bañado de dudas y de cambios constantes de pensamientos y sentimientos. En esta historia se nos dibujan relaciones tortuosas, relaciones sexuales y pasionales (no explícitas, la autora es sutil en ese sentido pero muy potente igualmente al llevarnos a esos aspectos), ensoñaciones y deseos impulsivos. El matrimonio, la fidelidad, las relaciones insospechadas, amores impulsivos, celosos, posesivos... ¡Cierta locura! Identidades rotas, violencia, alcohol e ideas suicidas. La suma de todo esto puede resultar chocante, pero, en el fondo, y a mi modo de ver, refleja realidades. Mucho para debatir se podría sacar (quizás sea esta lectura ideal para leer de forma conjunta). 

Había tanto que no sabía en realidad, que no me había preocupado por saber... 

Presentes quedan la concepción del amor y del sexo, y cómo relacionarse con ellos con la libertad deseada; la soledad, el anhelo de sentirse amado y la vitalidad que confiere sentirse querido; la juventud versus la vejez... Todo aquí implosiona de alguna manera y puede llegar un momento en el que todo se vuelve una especie de tornado algo caótico, pero que realmente se siente muy real. Llega a resultar cómico, también hay momentos que me han parecido incluso espeluznantes (aquellos donde se observa manipulación en las relaciones donde hay superioridad o poder de unos sobre otros, especialmente). Quizás te parece imposible lo que pasa, incluso a medida que avanzas puedes pensar: "Esto es demasiado"; pero, realmente, si se piensa, no ha de extrañarnos tanto: ¡la realidad suele superar a la ficción! No puedo decir que haya conectado con estos personajes, pero sí que me he sentido muy interesada en ellos, en lo que arrastran, en su imperfección; a algunos los he sentido más victimas que a otros, pero todos con sus errores y flaquezas. 

Tu amor por mí no habita el mundo real. Sí, es amor, no lo niego. Pero no todos los amores tienen un camino que recorrer, suave o no, y ante este no se abre ningún camino. 
Debido a lo que yo soy y debido a lo que tú viste, me he convertido en un objeto de fascinación terrible para ti. Soy una cabeza cercenada como las que utilizaban las tribus primitivas y los viejos alquimistas, que las ungían de aceite y les ponían un pedazo de oro sobre la lengua para que formularan profecías. Y quién sabe si esa larga relación con una cabeza cercenada no puede conducir a un conocimiento peculiar... 

Se observa la influencia de las convenciones sociales, y hay que tener en cuenta la fecha en la que se publicó esta novela y lo que se concebía y lo que no en ese momento —se tocan temas conflictivos y muy tabúes en la época: divorcio, aborto, libertad sexual, suicidio...—. Asimismo, ha llamado mi atención el curioso prisma con el que se mira al psicoanálisis. Insisto en que algunas situaciones o figuras pueden resultar repelentes y cuanto más se enreda la cosa, más alucinas con ellos; pero siento que la realidad es mucho más compleja de lo que pensamos y aquí queda reflejado. Impresionante el estilo de Murdoch y cómo maneja la ambientación también. 

—Hemos vivido juntos en un sueño hasta este momento —proseguí—. Cuando despertemos, ¿nos veremos aún el uno al otro? [...]
—Bueno —concluí—, tenemos que darnos la mano con fuerza y confiar en que seremos capaces de seguir aferrados el uno al otro mientras dure el sueño y cuando salgamos al mundo consciente. 

En definitiva, una novela que he disfrutado al mismo tiempo que me ha explotado un poco la cabeza con todo lo que trata y por cómo lo trata, con ese centro en exponer la complejidad humana y lo enrevesado de las relaciones. Seguiré descubriendo a esta autora que no me deja nada indiferente...

Comentarios