EL CUARTETO DE ALEJANDRÍA

Título: El Cuarteto de Alejandría
(Justine, Balthazar, Mountolive y Clea)
Autor: Lawrence Durrell
Traducción: Aurora Bernández
Idioma original: Inglés
Editorial: Edhasa
Año publicación/edición: 1962/2011
Páginas cuarteto: 1648

Sinopsis oficial:
Como sinopsis, para no suscitar algún spoiler, voy a colocar la del primer libro de la tetralogía (que tenéis su reseña individual en anteriores entradas): "Justine, arranque del monumental El cuarteto de Alejandría y quizá la mejor novela jamás escrita por Lawrence Durrell, es sin duda la más influyente de sus obras y ha dejado una huella indeleble en varias generaciones de lectores. Situada en la Alejandría cosmopolita y sensual de los momentos previos a la Segunda Guerra Mundial y centrada en un personaje cuya búsqueda de placer constituye un método de aprendizaje, ofrece al lector una experiencia como pocos libros pueden proporcionarle. Un turbador relato en el que la inteligencia, la perspicaz observación del ser humano y la riqueza narrativa adquieren un protagonismo absoluto."

Opinión del cuarteto:
La lectura de este cuarteto ha sido una experiencia totalmente distinta a todo lo que he leído anteriormente. La narrativa de Durrell me ha impresionado, como digo, no he leído una pluma similar y se aprecia un gran manejo del lenguaje. Creo que al escribir esta historia se propuso un reto y logró el objetivo. En sus palabras: "Como la literatura moderna no nos ofrece Unidades, me he vuelto hacia la ciencia para realizar una novela como un navío de cuatro puentes cuya forma se basa en el principio de relatividad. Tres lados de espacio y uno de tiempo constituyen la receta para cocinar un continuo. Las cuatro novelas siguen este esquema. [...] las tres primeras partes se despliegan en el espacio (de ahí que las considere hermanas, no sucesoras una de otra) y no constituyen una serie. Se interponen, se entretejen en una relación puramente espacial. El tiempo está en suspenso. Sólo la última parte representará el tiempo y sera una verdadera sucesora."

La historia tiene un gran contenido intelectual abarcando diversos temas: el amor, el tiempo, el espacio, las perspectivas, la vida, las relaciones y diferencias humanas, la moralidad y la no moralidad, la verdad, la corrupción, la política, las ideologías, la decadencia... Como dije en la reseña individual de Justine, la lectura requiere leerla con atención, no diría que es sencilla y ligera, sino que invita a reflexionar. Sus personajes son especiales, todos y cada uno de ellos: Justine, Nessim, Balthazar, Mountolive, Darley, Clea ... y por supuesto, Pursewarden, se quedarán en mi cabeza. Como los tres primeros tomos muestran partes de una misma historia desde perspectivas diferentes, la trama en sí te va sorprendiendo. Cuando crees saber el porqué de algunos acontecimientos, resulta que no es como pensabas o que quizá no tenían un único motivo ("Me refiero a la mutalidad de toda verdad. Un mismo hecho puede tener mil motivos, todos igualmente válidos, y además mil rostros. ¡Hay tantas verdades que no tienen nada que ver con los hechos!"). Al terminar Justine tienes una idea en la cabeza, al terminar Balthazar otra con información extra, al terminar Mountolive de nuevo hay información que explica más los hechos que ya conocías y otra extra que te hace entender mejor la trama; y finalmente, Clea, cierra el círculo dándole ese avance necesario ya en la historia y que termina de darle forma a las diferentes subtramas, sorprendiendo igualmente porque tampoco me esperaba que ocurriesen ciertos hechos.

Me ha gustado mucho el personaje de Pursewarden, en un principio no me llamaba la atención y poco a poco me ha conquistado (creo que como le ocurre al resto de personajes con él, si los leéis entenderéis a qué me refiero). Su lado de llevarte a experimentar la vida, a buscar el artista que tenemos dentro, a arriesgarte y a no tener excesivo miedo a mostrar tanto lo bueno como lo malo de uno mismo, porque todos tenemos lados oscuros aunque nuestra moralidad los esconda, a mirar y entender la vida sin el filtro de los protocolos y las exigencias sociales superficiales, a expresarla tal y como es sin tapujos... También se deja ver su frustración por no estar bien adaptado y ser ciertamente incomprendido (totalmente por su genialidad, bajo mi punto de vista): "Y Purserwarden, replicó: Estar semidespierto en un mundo de sonámbulos es aterrador al principio. ¡Luego uno aprende a disimular!". En fin, un personaje realmente especial para mí, y al que quería destacar. También me han gustado especialmente Mountolive y Clea.

He hablado sobre los diferentes cambios que se van dando en la trama, más que cambios diría que son cercanía a los verdaderos motivos que esconden los hechos, y aunque constantemente paraba y me decía a mí misma eso de: "y yo que pensaba que esto era por aquello y resulta que no", los acontecimientos y el cómo se van destapando en base a las diferentes perspectivas no son poco creíbles o incoherentes; la trama en sí me ha parecido muy poco predecible y además, considero que todo está muy bien hilado, creíble y pensado. Un genio este Durrell.

También destaco cómo se muestra y analiza el amor, no como ese amor perfecto, único, exclusivo hacía una persona y eterno. Durrell introduce la dosis de realidad en ese concepto tan perfeccionado, el amor visto con sus luces y sus sombras.

Como puntos negativos de mi experiencia: en algunos momentos me iba de la trama de fondo, ya que el lenguaje y los juegos narrativos del autor reflejados en reflexiones, descripciones de pensamientos y situaciones, hechos relacionados con temas políticos, etc. me hacían perder el hilo y estaba deseando volver a la historia de los personajes principales. También decir que el final, aun pareciéndome completo, me ha dejado con ganas de más, me hubiese gustado un final algo más detallado.

En definitiva, os invito a vivir la experiencia de leer este cuarteto. Yo me he quedado con la sensación de que hay cosas de las que no me he percatado probablemente y que podría sacar aún más jugo conociendo ya la base de los personajes y la historia; por ello pienso que una relectura me permitiría vivir la historia más ricamente, quizás algún día me ponga a ello.

Os dejo algunas citas que me han gustado (si sois de señalar las citas, cuando os pongáis con estos libros, cogeros bastantes posits porque hay para dar y regalar). Aquí os voy a colocar citas de los libros Balthazar, Mountolive y Clea; de Justine tenéis en su reseña individual.

Balthazar:
  • Al final -dice Pursewarden- todo podrá ser cierto de cualquiera. Santo y Malvado son copartícipes.
  • Cuando se arranca una flor, la rama vuelve a su posición primitiva. Con las cosas del corazón no ocurre lo mismo. 
  • Los hechos son inestables por naturaleza. Naruz me dijo un día que amaba el desierto porque allí "el viento borra las pisadas de nuestros pasos como quien apaga una vela". Los mismo, creo, hace la realidad. ¿Cómo podemos entonces perseguir la verdad?.
  • El inglés tiene dos palabras magníficas que ha olvidado: helpmeet (compañera), que es mucho más que lover (amante), y loving-kindness (cariño desinteresado), que es mucho más que love (amor) o pasion (pasión).
  • Hay tantas realidades como usted quiera imaginar. 
Mountolive:
  • Naturalmente, no me gustaría conocer a un artista al que admiro. La obra no tiene relación con el hombre, me parece. 
  • Deliberadamente, se obligó a caminar con lentitud, sin prisa. La prisa, como la emoción, siempre era deplorable, por sugerir que el impulso o el sentimiento son los amos cuando sólo debe reinar la razón.
  • Pero las presiones psíquicas no se alivian a menos que uno las mire de frente y las domine, que pelee con los peligros de una razón temblorosa...
  • Mountolive lo veía todo ahora, con un cansancio del mundo que al fin reconocía como la carga que pone la madurez sobre los hombros del adulto; el estigma de las experiencias, que envejecen al hombre. 
Clea:
  • Aquellas observaciones que en otra época, con otro contexto, hubieran tenido el poder de reducirme a cenizas, eran ahora para mí de importancia vital, pero en un sentido distinto. "Por arduo que sea el camino, uno termina por aceptar los términos de la verdad". 
  • Me refiero a la mutalidad de toda verdad. Un mismo hecho puede tener mil motivos, todos igualmente válidos, y además mil rostros. ¡Hay tantas verdades que no tienen nada que ver con los hechos! En cada instante la multiplicidad acecha a sus espaldas. 
  • Todos tenemos un innato terror de separarnos de nuestra moral dolorosamente racionalizada; y ocurre que el salto poético que predico se encuentra precisamente del otro lado. Nos aterra únicamente porque no nos atrevemos a reconocer en nosotros mismos las horribles gárgolas que decoran los pilares totémicos de nuestras iglesias: criminales, mentirosos, adúlteros, etc. 
  • Cuando viajamos de un lado a otro por los ferrocarriles del hecho empírico, nos sentimos demasiado seguros de nosotros mismos. Sin embargo, de vez en cuando recibimos un pequeño golpe en la cabeza de un ladrillo lanzado desde alguna otra región.
  • Una ciudad se convierte en un mundo cuando se ama a uno de sus habitantes. 

Comentarios

  1. Ahora tengo más ganas, si cabe, de leer el cuarteto. Te tengo que felicitar por tu reseña, muy detallada y crítica, me ha encantado. Estoy deseando ponerme a leer Justine, tengo tremenda curiosidad y presiento que me va a gustar.
    Un saludo.

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  2. ¡Muchas gracias! Me alegro que te haya gustado la reseña. Estoy deseando ver qué te parece Justine y espero que la disfrutes. Te iré leyendo :D Un abrazo!!

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  3. Hola María, pues nada igual algún día lo intento con el primero, creo que el problema que pueda tener yo con este libro sea el lenguaje o las disquisiciones filosóficas, políticas, etc...
    Un besazo

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    Respuestas
    1. Hola, Nitocris.
      A ver, ya te adelanto que no tiene nada que ver con el estilo de Gerald Durrell (ahora que hemos hablado recientemente de su obra de Corfú). Este es más intensito, sí, nada que ver. Pero la verdad es que la experiencia de leer el cuarteto entero es muy peculiar, me gustó mucho y sé que repetiré en algún momento. No te diría que es lectura liviana, recuerdo que alguno me costó en ciertos momentos, pero no sé, si te dejas llevar y vas descubriendo cómo va desengranando todo, la complejidad de los personajes, las distintas perspectivas sobre los mismos hechos, el avance ya necesario en el último tomo... Muy bueno. Ya contarás si lo lees.
      Un besito.

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  4. Una obra notable. Hoy no sería publicada sin antes serrucharle grandes espacios. Qué cosa esta del autor de animarse a contar los mismos hechos desde diferentes perspectivas en varios libros diferentes!!!

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