EL ENIGMA DARTMOOR

Título: El enigma de Dartmoor
Autor: Basil Thomson
Traducción: Sussana González y Blanca Briones
Idioma original: Inglés
Editorial: dÉpoca Editorial
Año de publicación/edición: 1936/2022
Páginas: 263

Sinopsis oficial:

Inglaterra, 1935. El señor Dearborn, de Winterton, fallece en su casa pocos días después de sufrir un accidente de tráfico en los páramos de Dartmoor. Tanto el juez como un forense dictaminan que la causa de la muerte ha sido la conmoción cerebral sufrida durante el propio accidente. No obstante, una serie de cartas anónimas enviadas a las oficinas de Scotland Yard advierten del posible error que se está cometiendo y piden que se posponga el entierro y se realice una investigación más profunda sobre el asunto. El elegido para hacerse cargo del caso y desplazarse al condado de Devon es el inspector jefe Richardson, famoso tanto por su juventud a la hora de ascender dentro del cuerpo como por su pericia para resolver casos difíciles. Con la inestimable ayuda del sargento Jago, Richardson comienza unas pesquisas que pronto le llevan a descubrir que por cada detalle resuelto en este misterio surgen nuevas intrigas, y todas ellas convergen en el enigma más sorprendente de todos: el propio señor Dearborn. 

Sir Basil Thomson (1861-1939). Célebre autor británico que fue jefe del CID de la Policía Metropolitana durante la Primera Guerra Mundial. Publicó extraordinarias novelas de misterio con gran éxito durante la «Golden Age».

Opinión:  

El enigma Dartmoor es una novedad de la colección dÉpoca Noir de dÉpoca Editorial (editorial de esas a las que no hay que perder nunca de vista, unas ediciones impecables). En esta ocasión nos traen este título del escritor británico Basil Thomson, publicado en 1936, con un caso de su famoso inspector jefe Richardson. En la Introducción de esta edición, escrita por Juan Mari Barasorda, se señala lo siguiente: «El inspector Richardson fue el detective con el que Thomson pasó a la historia de la novela policíaca. Este personaje representaba a los mejores hombres que su creador había conocido en Scotland Yard, una sabia mezcla entre el detective que sigue el procedimiento policial y el "sabueso" que conoce el submundo criminal». Sin duda, esto es algo que se aprecia cuando descubres el perfil y las características de este personaje a medida que vas leyendo. Pero empecemos hablando un poco sobre lo que se cuece en este caso detectivesco...

Nos situamos en la Inglaterra de 1935 y viajamos a los páramos de Dartmoor debido a la muerte, un tanto extraña, del señor Dearborn en Winterton. Este hombre falleció en su casa unos días después de haber tenido un accidente de coche y, en principio, su muerte no causó demasiado revuelo, se dictó que había sido consecuencia de dicho accidente precedente... Sin embargo, el asunto regresó a la palestra cuando llegan unas cartas anónimas, tanto a la policía local de Winterton como a la sede de Scotland Yard en Londres, indicando que esa muerte no había sido debida al accidente como habían dictaminado, sino a un ataque que el señor Dearborn había sufrido en la carretera. Esto levanta sospechas y se reabre el caso, solicitándose nuevos informes médicos y también enviando al inspector jefe Richardson de Scotland Yard, acompañado por el sargento detective Jago, al condado de Devon para ayudar a resolver este rompecabezas, que poco a poco comienza a enredarse cada vez más... ¿Cómo y por qué murió el señor Dearborn? A medida que van tirando de diversos hilos irán descubriendo que poco se sabe del pasado de este hombre, ni si quiera su mujer parece conocerlo, y esto entorpecerá la búsqueda de algún culpable (si es que es verdad lo que señalan esas cartas anónimas). Nombres e identidades confusas, traiciones y hechos del pasado que habrán que destapar e investigar. Richardson y Jago no lo tienen fácil, pero pondrán todo de su parte para desenredar este enredo y saber qué es lo que hay realmente detrás de esta muerte confusa.

No había ninguna pista segura de la que partir, no había más remedio que hacer deducciones y formular teorías.

Una novela amena, de lectura atrapante. Me ha gustado conocer este caso y cómo se desarrolla. Los procedimientos policiales y de investigación están muy bien plasmados, algo que he disfrutado (sin hacérseme pesado en ningún momento). Se aprecia que el autor tenía experiencia en la materia y que trabajó en este mundo, en esta profesión sobre la que escribe. Describe todo a la perfección, dándole un considerable peso a esos pasos policiales imprescindibles en una investigación, así como a la perspicacia y el saber hacer de un buen detective, que ha de sumar una buena disciplina así como un buen sentido común y conocimiento del crimen, siendo avispado en su búsqueda y paciente cuando las cosas no se encuentran a la primera. 

Le confesaré un secreto. Si está seguro de que algo ha ocurrido, no pregunte al testigo si ocurrió, porque le dirá que no; hable del asunto como un hecho que ambos conocen y, nueve de cada diez, no se arriesgarán a mentir al respecto.

En la introducción también se menciona que este caso está incluido en un subgénero de la novela policíaca denominado procedural, un tipo de ficción en la que los procedimientos y métodos de investigación policiales son la base. Y sí, totalmente. Aunque en ningún momento se olvida el autor de dar intriga al lector, al menos a mí me ha tenido pegada a las páginas; maneja muy bien la información relacionada con todo el misterio detrás de lo acontecido: quién era este señor, qué pasado ocultaba, por qué querrían hacerle daño, de dónde procede... Está muy bien conjugado esa descripción de los procedimientos policiales con la intriga (incluidos giros y sorpresas), aunque el mayor peso esté en mostrar esas distintas fases o pasos en la investigación. Las pistas y lo que los detectives van descubriendo saca a la luz información que no siempre entendemos, o que dan a entender cosas confusas (para ellos también); he estado atenta a sus actos: cómo reinician sus pasos o ajustan su búsqueda al encontrar algo, en quién parecen confiar y en quién no, cómo van adquiriendo más información y la utilizan para ir en uno u otro sentido, los impedimentos que encuentran (también desde las sedes policiales) y las presiones dentro del servicio policial (lo que tienen que lidiar con superiores y otros puestos, las relaciones tensas que hay y los tira y afloja a los que han de jugar para conseguir ciertas cosas...). Vives la experiencia y no solo la del trabajo de investigar y destapar el misterio, sino también la de lidiar con las dudas y el no saber por dónde tirar, dejándose ver la presión y las problemáticas varias dentro de ese mundo laboral, quedando bien retratada esta profesión en esa época.  

Me ha gustado viajar con estos detectives por diversas zonas del condado de Devon, por el páramo de Dartmoor y demás lugares, para investigar y seguir los pasos de los implicados en este caso en el que sacar a la luz un pasado, y unos actos que se mantenían ocultos, será primordial para dar sentido a esa muerte extraña que los ha llevado hasta allí.