ALVES Y COMPAÑÍA

Título: Alves y C.ª
Autor: Eça de Queirós
Traducción: Juan Lázaro

Idioma original: Portugués
Editorial: Reino de Cordelia
Año de publicación/edición: 1925/2021
Páginas: 134

Sinopsis oficial:

El señor Alves ve con simpatía los escarceos amorosos de su socio, el soltero Machado, hasta que un día lo descubre en brazos de su mujer. Eça de Queirós parte de ese adulterio para construir una de sus novelas más ágiles y divertidas. Dejando a un lado el fatalismo amoroso de Gustave Flaubert que impregnaba la literatura de la época, la ironía y el sentido del humor se imponen en las relaciones entre ambos socios, lo que desemboca en un final tan inesperado como deslumbrante. Aquí está la mejor prosa de su autor: la aguda visión de la sociedad portuguesa a caballo entre los siglo XIX y XX, los personajes, definidos con sutiles pinceladas que encuentran la sonrisa cómplice del lector; la naturalidad de los diálogos y el empleo de un lenguaje preciso que siempre es limpio y efectivo, de una belleza ajena a juegos barrocos. La traducción de Juan Lázaro salvaguarda en español la brillantez del texto original que, como ocurre con los grandes clásicos de la Literatura, ha logrado mantenerse fresco pese al paso del tiempo.

Opinión: 

Queirós, considerado uno de los exponentes de la prosa realista portuguesa del siglo XIX, nos trae en esta pequeña novela a un matrimonio bien avenido formado por Alves y su mujer Ludovina, y a un tercer personaje principal, íntimo amigo de la pareja y socio de empresa de Alves, Machado. Alves tras percatarse de las ausencias de su socio, y de las excusas que este da a las mismas, piensa que está de romance con alguna muchacha; lo cual considera como una anécdota graciosa y aumenta, todavía más si cabe, su simpatía hacia su joven amigo. Pues resulta que Machado, este joven trabajador, responsable y de buen ver, sí que tenía un flirteo con una mujer, pero no con cualquiera, sino con su Lulú. Los pilla infraganti... Aquí arrancamos y aquí comienza la debacle de la vida de Alves: toda su existencia se descompone, nada puede ser como antes. ¿Por qué le pasa esto a él?, con lo que quiere a su Lulú... No tiene paz en su alma atormentada, traicionado no solo por su mujer sino también por su íntimo amigo, considera que tiene cuentas pendientes con Machado; este hombre, culpable de su situación, ha de dar la cara. Pide consejos a otras amistades y todo se enreda cada vez más. Mientras, el suegro se aprovechará de todo lo que pueda y más de esta situación. 

Novela entretenida, de lenguaje sencillo, con un humor agradable y un final no del todo esperado. Tiene buen ritmo, el autor consigue mantener el interés del lector en lo que va sucediendo y los personajes están bien presentados y definidos, aun sin dar demasiados detalles sobre ellos. Alves se te meterá en el corazoncito, incluso con su sufrimiento lo acompañaremos en su caminar con cierta sonrisa y alguna que otra risa. Cuando escucha a sus amigos, los cuales comparten sus andanzas, se ve a sí mismo como la víctima de aventuras similares hundiéndose más en su humillación. Pobre Alves, él que es tan bueno y diferente a ellos que le toque vivir esto... En la parte final de la novela se dan saltos en el tiempo permitiendo al lector conocer el destino de los personajes principales, algo que me ha gustado mucho. 

El tema central de la novela es el adulterio (el shock que produce y el sufrimiento por el que pasa la víctima, las sensaciones contrapuestas de querer regresar con el ser amado y mantener a la vez el recelo y la ira por la traición, etc.). También se centra en la amistad, en cómo el amor puede ayudar a superar obstáculos y la importancia del perdón. De forma secundaria se nos muestra a la burguesía portuguesa de la época y sus costumbres, se deja ver la situación de la mujer del momento y las apariencias que había que mantener en cierta posición social.  

En definitiva, una novelita muy amena de leer y que nos muestra una historia en la que hay cierta superación y desarrollo personal, señalando que mantener el orgullo y alejarse del perdón no siempre ha de ser la mejor solución, ya que nos puede hacer perder cosas de gran valía en nuestra vida.