EL SECRETO DE LA PERLA

Título: El secreto de la perla
Autora: Di Morrissey
Traducción: Efrén del Valle

Idioma original: Inglés
Editorial: Ediciones B
Año de publicación/edición: 2007/2014
Páginas: 538

Sinopsis oficial:

Broome, Australia, 1893. Es la época dorada, deslumbrante, salvaje y apasionada de la industria de la perla. Allí los inmigrantes europeos encuentran un continente inexplorado y la antigua cultura aborigen. Es en este contexto que la joven Olivia Hennnessy se encuentra con el gallardo capitán Tyndall, quien le hace una tentadora oferta: que se una a él en sus actividades relacionadas con la pesca perlera. 

Sídney, Australia, 1995. Lily Barton es una mujer hermosa, brillante como el nácar. No sabe cuáles son sus orígenes, y siempre se ha sentido ansiosa por aprender más sobre su pasado. Buscando hallar su identidad y su legado, se embarca hacía hacia Broome en busca de sus raíces familiares. Allí descubrirá el diario de su bisabuela Olivia. Pero su búsqueda de una identidad revela mucho más de lo que podía haber imaginado. Pronto descubrirá el secreto de la perla.

Opinión:

El secreto de la perla es una landscape que me ha parecido entretenida y con una muy buena ambientación. La sinopsis es bastante clara, revela fielmente lo que te vas a encontrar en el libro: una mujer, Lily Barton, ansía saber de dónde procede. Este deseo nos lleva a conocer en profundidad la historia de su bisabuela, Olivia, una inglesa que se aventuró a viajar a Australia con su marido para buscar una mejor vida allí, convirtiéndose en una de los muchos inmigrantes europeos que apostaron por la misma idea. Tras su llegada a ese mundo, Olivia vivirá diversos acontecimientos —unos felices y otros trágicos con los que tendrá que lidiar—, conoce a personas y a diferentes culturas que la enriquecen, descubre el mundo de la extracción de perlas —totalmente nuevo para ella—, y en definitiva, vive experiencias que jamás imaginó que viviría y que marcan su persona, no esperando encontrar lo hallado en aquella tierra alejada de su Inglaterra natal. El libro se divide en dos tiempos, pasado y presente, siendo más desarrollada la trama en el tiempo pasado ya que es en ella en la que se centra el grueso de las páginas. 

Se me ha hecho una lectura amena de leer y muy entretenida, nada tediosa. Como puntos fuertes de la historia destaco la ambientación y la focalización en la extracción de perlas, lo cual me ha parecido muy interesante. Nos sitúa en un momento histórico en el que Broome fue un emplazamiento que atrajo a muchos a migrar hacia allí por su industria perlera. Se destaca el papel de los japoneses que llegaron a esta localidad como buzos expertos, que se dedicaron a la pesca de ostras por las aguas de la zona y alrededores; también se deja ver la dificultad de tal cometido, ya que muchos perdieron la vida en ello. He buscado fotografías de la época en las que aparecen los lugres perleros (pearl luggers), las escafandras de los buzos, la recolección de ostras y extracción de perlas, así como atardeceres en Broome que me han conquistado. Las partes que profundizan en la cultura aborigen y su forma de vida también enriquece la trama, señalándose en todo momento que no eran nada aceptados por la raza blanca. Asimismo, se vive junto a los personajes el impacto tanto de la Primera Guerra Mundial como de la Segunda. También menciono, cómo no, la historia romántica y de relaciones entre los diferentes personajes; hay momentos realmente emotivos y dentro de las figuras destaco a Olivia, como un personaje con grandes toques feministas y una potente resiliencia. El personaje de Tyndall también es de esos que gustan, y que es fácil cogerle cariño, en el que se ejemplifica el respeto hacia todos como personas. Los embrollos de la vida y que no siempre las cosas salen como uno desea, pero que hay que continuar viviendo, se muestra en muchas partes de la historia.

Como puntos débiles indico que hay personajes que considero poco elaborados, aquellos que forman parte del tiempo pasado quedan bastante claros y perfilados, pero los del tiempo actual quedan muy poco descritos a mi parecer. Con un final algo precipitado para la parte presente, de carácter abierto, que no considero que sea inapropiado pero sí que me ha dejado un poco fría. También algunas partes de la trama me han producido cierto choque, en el sentido de poco creíble por demasiada coincidencia o casualidad, pero también es verdad que las casualidades existen y podrían darse dichos casos fuera de la ficción. 

En resumen, es una novela que he disfrutado y que me ha entretenido, pero con ciertos aspectos que hacen que no la considere de las mejores que he leído de este género. Como suelo hacer, dejo alguna de las citas que más interesantes me han parecido:

• La vida empieza cuando uno nace. Olvida todo el bagaje, porque no puedes hacer absolutamente nada al respecto. Yo intenté darte libertad. Uno averigua qué necesita saber cuando necesita saberlo. 
• A veces, saber demasiado puede ser doloroso. 
• Los hilos que unen a dos personas, no están hechos de acero inflexible, sino que se estiran, tiemblan y se parten como la goma elástica, y nada es siempre igual. La vida era una cuestión de pequeños cambios constantes y había que tensar y soltar aquellos hilos cuando fuera necesario. 
• A veces se sentía diferente a las demás. Dejó que un puñado de arena se escurriera entre sus dedos. Al abrir la mano, estudió atentamente los granos pegados a las yemas. Cada uno de ellos era distinto a los demás. No eran del mismo tamaño o forma. Los sopló suavemente y volvieron a caer en la playa donde eran indistinguibles del resto. Aquello significa algo, pensó, pero no sabía qué.